jueves, 12 de febrero de 2009

La calma

Madre, te quejas, tu cara expresa la desazón, el malestar, la desesperanza, la desilusión cuando dices yo que creía que ahora que puedo comer...comería. Se agolpa en mis sienes el miedo cuando te oigo y veo tu expresión. Trato de reaccionar tranquila, siempre evocando la calma ante ti, también ante mí pero me esfuerzo menos. Soy mucho mejor actriz de lo que pensaba o ¿quizá no lo soy para ti? quizá me ves por dentro y adivinas mi miedo a perderte, mi tristeza interior. Tú me has parido, me conoces bien. ¿Conseguiré ser más hábil que tú? no es empresa fácil. Pero te hice una promesa y la tengo presente aunque tú no lo sabes.

2 comentarios:

  1. Jo...

    Tengo un nudo en la garganta ahora que no puedo ni tragar..
    Uff... en fin, no se que decir ahora..

    ResponderEliminar
  2. Gracias, guapa, por estar. ¿Para cuándo el café? Si te apetece, claro.
    Un besito

    ResponderEliminar